La evolución del ojo - Richard Dawkins -

"Al amanecer, algunos ojos ya eran de la oscuridad y huyeron hacia las tinieblas del ayer con un puñado de semillas por sembrar"

-Silvio Rodríguez-

Quien esté dispuesto a aceptar la evolución como la única teoría viable existente para explicar la vida en la Tierra, se encontrará con algún resquemor de duda al ver algo como el ojo. Y es que ¿Cómo se puede crear algo tan complejo como un ojo? Precisamente, no se puede. No se pudo crear. No puede simplemente aparecer en un solo paso tampoco. La respuesta es: la aparición, desarrollo y evolución del ojo no es muy diferente al resto de las partes, en apariencia, más simples. Forma todo parte de la misma carrera armamentista de las especies, como vehículos de los genes, para que estos se repliquen mas y mejor. La principal prueba de la evolución de este órgano es que, hoy en día, podemos encontrar desde la más primitiva forma del ojo hasta la más compleja, pasando por muchas variantes intermedias. Hay distintos tipos de visión y cada especie toma sus ventajas de cada una. Algunos insectos relegan nitidez pero ganan velocidad de reacción, algunos mamíferos y reptiles pierden profundidad y noción de distancia pero tienen un amplio campo de visión. Los humanos captamos una gran cantidad de colores (2.1 millones aproximadamente) pero perdemos visión nocturna. Variantes como disposición, tamaño, sensibilidad y complejidad determinan las ventajas y desventajas que ese ojo otorgará a su portador. En este video, podemos ver explicada de manera muy entendible, como puede ser posible la transformación de aquellas simples células fotosensibles y la necesidad de captar cada vez más luz, recibirla e interpretarla de mejores maneras. El video es sólo un fragmento del documental de Richard Dawkins: “El relojero ciego”.

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